Bogotá (Lunes, 17-07-2017, Gaudium Press) Durante la segunda mitad del mes de junio, y en el marco del Centenario de las apariciones de la Virgen en Fátima, los Heraldos del Evangelio visitaron con la Imagen Peregrina el sur de Colombia.
Estuvieron en las ciudades de Santiago de Cali, San Juan de Pasto, Asunción de Popayán y Tuluá, siendo acompañados por gran el fervor y la fe robusta de los católicos de estas cuatro emblemáticas ciudades como se puede constatar en las imágenes adjuntas.
| En peregrinación por las calles de Cali |
En Cali visitaron las parroquias de la Resurrección, la Transfiguración, San Nicolás y la iglesia Catedral, esta última precisamente en el día de Corpus Christi. Acompañaron devotamente la procesión del Santísimo Sacramento custodiándolo por las calles del centro antiguo, y al llegar a la Plaza Caicedo hicieron marco para la entrada solemne de Nuestro Señor Sacramentado a la Catedral, de manos del Arzobispo, Mons. Darío de Jesús Monsalve.
En la ciudad de Popayán se realizó una Misa Solemne en la iglesia Catedral, precedida por el Arzobispo, Mons. Iván Antonio Marín, quien al final de la ceremonia coronó la imagen peregrina de la Virgen de Fátima, consagrando con este acto a toda la arquidiócesis y a todo el pueblo payanés al Inmaculado Corazón de María.
| En la Catedral de Pasto |
Viajando un poco más hacia el sur del país, visitaron la ciudad de Pasto. Allí estuvieron durante dos días seguidos en la iglesia Catedral, consagrada al Sagrado Corazón de Jesús y encomendada al patrocinio de San Ezequiel Moreno Díaz quien siendo obispo de Pasto bendijo y colocó la primera piedra de ésta. La imagen de la Santísima Virgen permaneció durante todo el día acompañada de fieles que afluían a la iglesia en masa para pedir el auxilio y la protección de la Santa Madre de Dios. En la Santa Misa de clausura de la visita, una multitud ingente llenó las naves de la catedral con sus vivas, cantos y aclamaciones a la Santísima Virgen.
También en Pasto visitaron a las Hermanas Bethlemitas en el colegio que lleva su mismo nombre, en donde reposa el cuerpo incorrupto de la cofundadora de la comunidad, la Beata Madre María Encarnación Rosal.
| Junto al Cuerpo de la Madre María Encarnación Rosal |
Unos días después pasaron por el “Corazón del Valle”, la ciudad de Tuluá. Al llegar a las puertas de la ciudad una fila interminable de vehículos con bombas azules y blancas los esperaba, para acompañar en procesión a la Santísima Virgen hasta la iglesia de Nuestra Señora de Fátima. La Policía Nacional fue la encargada de hacerle calle de honor a la entrada del templo al ritmo de las notas marciales del “Trece de mayo”. La Santa Misa fue celebrada por el párroco y acompañada por los cantos gregorianos y polifónicos del coro de los Caballeros de la Virgen.
Visitaron también, pero a manera de peregrinación, los Santuarios Nacionales y Basílicas Menores del Señor de los Milagros de Buga y de nuestra Señora de las Lajas, visitas imperdibles para todos aquellos que visitan estas bendecidas tierras del sur del país.
| Junto a la Virgen de las Lajas |
En estos días la peregrinación la Imagen de la Virgen de Fátima recorre ciudades del llamado “Eje cafetero”. (GTB)
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